¿Os imagináis un tipo de verduras que, además de todos sus beneficios, vitaminas y minerales, nos ayuden a prevenir enfermedades y mejorar nuestra salud?
¡Existen! Y son las grandes conocidas-desconocidas: Las crucíferas.
Las verduras crucíferas son parte de la familia de plantas Brassica, se nombran así porque sus flores de cuatro pétalos se asemejan a una cruz o crucífera(Una que lleva una cruz).
La familia de las crucíferas comprende una amplia familia de vegetales que está formada por más de tres mil especies. Los vegetales más conocidos de esta familia son: brócoli, coliflor, repollo y kale y están formados principalmente por agua, nos aportan fibra, hidratos de carbono complejos, minerales como calcio, potasio, magnesio, vitaminas y otras sustancias antioxidantes las cuales nos ayudan a mantenernos sanos.
¿Verdad que os suenan?
Carotenoides:
Antioxidantes encargados de dar a las frutas y verduras sus colores característicos. A este grupo pertenecen la luteína, la zeaxantina y el betacaroteno. Los dos primeros elementos han demostrado su papel fundamental en la protección de la salud visual y el betacaroteno es un antioxidante que ayuda a la piel a protegerse de la acción de los radicales libres y a reducir el riesgo de quemaduras solares. También interviene en la prevención de las cataratas y contribuye a mantener una buena salud cardiovascular y ósea.
Vitaminas C, E y K:
Estos micronutrientes ayudan a combatir los daños causados por la oxidación celular. En concreto, la vitamina C ayuda a mantener la piel jugosa y saludable y además es una gran aliada de la salud bucodental. La vitamina E, también conocida como tocoferol, interviene en la formación de los glóbulos rojos y en la síntesis de vitamina K, necesaria para regular la coagulación sanguínea y para el mantenimiento de los huesos.
Folatos:
Los folatos son vitaminas del grupo B (Concretamente vitamina B9) aunque es más conocida la denominación como ácido fólico. Este nutriente es esencial para proteger la salud cardiovascular y prevenir defectos del tubo neural, como la espina bífida.
Además de estos compuestos, las verduras crucíferas son ricas en minerales, fibra y otros elementos químicos con azufre denominados glucosinolatos, causantes del penetrante olor característico de estos vegetales, así como de su sabor amargo. Durante la masticación y la digestión, estos glucosinolatos se descomponen en otros químicos.
Coliflor:
Puede ser de color blanco, morado, verde, naranja pálido. Aporta el 77 por ciento de la vitamina C requerida diaria, también es una buena fuente de vitamina K, proteína y minerales esenciales.
Brócoli:
Hortaliza de origen mediterráneo, es un buen aliado para combatir los signos de la edad, pues tiene un alto contenido de antioxidantes. También es un buen agente desintoxicante, pues ayuda a eliminar toxinas como el ácido úrico y mejora el funcionamiento del hígado. Además, es un buen aliado para las personas con diabetes, pues tiene un alto contenido de fibra y es bajo en calorías.
Repollo:
Esta verdura se caracteriza por su forma redonda y un color verde pálido con tonos blancos en el tronco. Destaca por su contenido de fibra que ayuda a regular el tránsito intestinal y reduce el colesterol malo. Además, ayuda en los problemas de artritis y otras enfermedades como el cáncer.
Kale:
Es un tipo de col rizada que se ha popularizado notablemente por las propiedades nutricionales con las que cuenta, pues posee un bajo valor calórico y su alto contenido en minerales como el calcio, el hierro, magnesio, potasio y zinc. Por su riqueza en proteínas y el bajo aporte calórico es un alimento aconsejable para saciar el organismo.
Coles de Bruselas:
Esta hortaliza es muy apreciada por su contenido de vitaminas y minerales como la vitamina C, E y hierro, que ayudan a prevenir o mejorar los casos de anemia ferropénica, además ayuda a mejorar el tránsito intestinal y es un alimento ideal para mantener el sistema inmunológico en condiciones óptimas.
Los especialistas afirman que incrementar el consumo de vegetales siempre es positivo, ya que estos alimentos tienen infinidad de beneficios para la salud y han demostrado ejercer un papel protector frente a diversas patologías.
Por otro lado, las personas con hipotiroidismo que están en tratamiento deben tener un patrón de consumo algo más moderado con respecto a las crucíferas crudas, ya que uno de sus compuestos, los isotiocianatos, compiten por el yodo, un oligoelemento necesario para sintetizar las hormonas tiroideas.
Por su parte, las crucíferas también pueden interferir en la absorción de los principios activos de algunos medicamentos anticoagulantes. De esta forma, y aunque normalmente no hay ningún problema, es conveniente consultar con el especialista si se puede o no consumir este grupo de alimentos con total tranquilidad.
En nuestra tienda online encontrarás diferentes productos con antioxidantes.
Y recuerda, si necesitas cualquier consejo desde Viñamata Group nuestro personal te ayudará en todo lo que necesites.
Nuestros clientes confían en nosotros
Opiniones de nuestros clientes
Recibe nuestras novedades
Te hemos enviado un correo electrónico para que confirmes tu e-mail.
Una vez confirmado, recibirás tu CUPÓN para disfrutar del descuento.